Formas más angulosas,un ligero aumento de sus dimensiones, mejora en las calidades de los materiales usados tanto en el interior como en el exterior del vehículo y una renovada gama de motores - todo ello remozado según los nuevos rasgos genéticos de la marca- es lo que nos ofrecen, a grosso modo, desde Volkswagen con su nuevo Touran 2010, cuya llegada a nuestro mercado se ha fijado para el mes de julio si las previsiones no fallan.
Unas filtraciones antes de tiempo debido a un -deliberado o no- despiste de la página especializada Auto Express nos han permitido ver cómo será el nuevo monovolumen germánico y que mejoras traerá con respecto a su antecesor. A primera vista, la impresión general no es sino la de que se han hecho bien las cosas desde Wolfsburgo, la sede central de la marca, en lo que se puede considerar como un profundo reestyling más que una versión completamente nueva, a tenor de las opiniones de otros blogs consultados.
Así, analizando con más detalle su nuevo diseño, observamos que el monovolumen que ha logrado acaparar aproximadamente el 50% de las ventas en su segmento en Alemania ha ganado en carácter si bien su originalidad se resiente claramente al compartir la mayoría de los rasgos del Polo o el Golf en la búsqueda de una imagen de marca, quizá, demasiado clónica en casos como este (lo que no es ni bueno ni malo, todo sea dicho).
En el frontal destacan sus nuevos grupos ópticos, más armoniosos ahora con el diseño de la parrilla y la adopción de dos acentuados nervios en los laterales del capot que nos recuerdan claramente a las del Scirocco, sin ir más lejos.
La zaga está realmente conseguida gracias al dinámico efecto que inspira el nervio lateral, que parte desde la ventanilla trasera -algo recortada- para ir cayendo hasta unirse al paso de rueda delantero.
Quizá la parte menos conseguida sea la trasera, que pese a lucir dos atractivas luces de freno compuestas por leds, no acaba de librarse de ser una extensiónexcesivamente plana y aparatosa, donde la superfície acristalada y la baja posición de las luces traseras no ayudan a hacer fluído el conjunto.
El interior es, sin embargo, mucho más acertado que en el modelo anterior, dando ahora una decidida impresión de calidad y funcionalidad dignas de la tradición de Volkswagen. Las texturas lisas y las comedidas inserciones en aluminio -de volante y pomo, principalmente- dotan de la necesaria calidez a un interior de escaso colorido pero con una buena factura y materiales que no desentonan, algo importante en este modelo.
Por último, las motorizaciones que se ofrecerán para el modelo serán dos de gasolina (un 1.2 TSI de 105 CV y un 1.4 de 140 CV) y cuatro de diésel (TDI's de 90, 105, 140 y 170 CV).
El punto más negativo es que previsiblemente esta puesta al día del modelo, unida a la gran cantidad de opciones en equipamiento que ofrece, nos hacen pensar en un precio que superaría ostensiblemente al del Touran anterior. El modelo está siendo presentado actualmente en la feria automovilística de Leipzig.
Fuente: Europa Press, Autoblog
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